Conducción eficiente

¿Sabes qué es la conducción eficiente? Simple: la conducción eficiente es la forma de conducir que trae consigo una serie de increíbles ventajas.

Lo más interesante es que tú no serás la única persona en recibirlas sino también el planeta.

A continuación te diremos cuáles son y el modo en que puedes llevarla a cabo.

Los 7 pros de la conducción eficiente

Las ventajas más resaltantes que proporciona esta modalidad de uso de un vehículo son:

1. Disminución de las emisiones de dióxido de carbono (CO2).
2. Reducción de la contaminación acústica.
3. Acortamiento de la cantidad de combustible.
4. Ahorro de dinero producto de la no necesidad de utilizar mucho combustible y de no hacer tantas reparaciones en el vehículo.
5. Incremento de la seguridad vial y comodidad tanto para los conductores como pasajeros.
6. Aumento de la conservación de los vehículos ya que las piezas del mismo se desgastarán menos rápido.
7. Respeto al medio ambiente.

¿Cómo usar mi coche con una conducción eficiente?

Hablar de conducción eficiente qué es implica abordar cómo efectuarla. Es por ello que, si te gustaron los pros de la conducción eficiente que recién leíste y quieres aplicarla en tu día a día al montarte en tu vehículo, te daremos una serie de trucos para que lo hagas correctamente:

1. Enciente el motor sin pisar el acelerador

Si al encender el motor pisas el acelerador de tu coche, habrá un consumo innecesario de combustible.

En consecuencia, solo pisa el acelerador y haz el juego de embrague (el que tiende a causar temor durante las primeras clases de conducción) al momento en que tengas la disposición de salir de tu casa, trabajo, gimnasio, etc. y circular.

2. Permanece al pendiente de todo

En cuanto a la conducción eficiente, con «todo» nos referimos a la vía y a la situación en la que te encuentres. Con exactitud, debes anticiparte para que te dé chance de reaccionar ante lo que pueda ocurrir y actuar con previsión.

Si lo haces, podrás conducir con mayor seguridad, comodidad y fluidez. Por ejemplo: al aproximarte a una rotonda o un cruce, ve disminuyendo las marchas progresivamente con el fin de que no tengas que frenar de golpe al encontrarte ante alguna de esas circunstancias.

3. Emplea marchas largas

Las veces que tengas la oportunidad de conducir con marchas largas, hazlo. ¡No desaproveches esas ocasiones!

¿Por qué? A diferencia de las marchas cortas, las largas gastan menos combustible.

Entonces, lo que debes hacer, por ejemplo, es usar la 1.ª para salir y comenzar la marcha. Al cabo de unos segundos, cambia a 2.ª (siempre y cuando las condiciones te lo concedan).

Claro, es fundamental que las marchas se adapten a la situación vial del momento debido a que si haces lo contrario, no estarás acorde con la conducción eficiente, pues aumentarás el riesgo de ocasionar accidentes de tráfico y de producirle daños al vehículo.

4. Evita dar acelerones y frenazos

Dar acelerones y frenazos, aparte de ser desagradable para todos los pasajeros, incluyéndote, afecta el cuello.

Entonces, para un mayor confort y cuidado de la salud, lo ideal es que procures pisar el pedal de aceleración y freno de manera progresiva con la finalidad de que la conducción sea lo más uniforme posible.

En pocas palabras, no aceleres ni frenes de golpe.

5. Saca todo el peso sobrante del vehículo

Un aspecto en torno a qué es conducción eficiente comprende tomar consciencia de ciertos hábitos, como por ejemplo: tener en el vehículo objetos sin usar (cadenas de nieve en pleno verano, llantas dañadas, ropa sucia…) en fin, usar el vehículo como si fuese un trastero.

En lo absoluto, no es lo recomendable: mientras menos cargado tengas tu vehículo, menos combustible te exigirá.

Ahora que estás al tanto, saca todas las cosas innecesarias y lleva solo lo que en verdad vas a usar o lo que es indispensable (neumáticos, herramientas de mecánica, dispositivos de iluminación…).

6. Sustituye el pedal del freno por el freno motor

¡Sí! Tal cual como lo lees. Reemplazar el pedal del freno por el freno motor es una medida de conducción eficiente.

En los casos en los que quieras bajar la velocidad, en vez de usar el pedal del freno, opta por quitar el pie del acelerador. Así el motor actuará como freno.

Por supuesto, solo debes hacerlo en los casos en que las vías cuenten con las condiciones para efectuar esta práctica (que no consume combustible) y que el espacio te lo permita, dado que como es de suponer, si por ejemplo quieres hacer un cruce a la izquierda y lo tienes muy cerca, el freno motor no te servirá si no desaceleras con suficiente antelación.

7. Regula el aire acondicionado

El aire acondicionado, en cualquier parte donde esté presente, genera un consumo excesivo de energía.

En el caso de los vehículos, este accesorio, así como otros, ocurre lo mismo.

Por lo tanto, así como se toman determinadas medidas para evitar que consuma mucha energía en el hogar, se puede reducir su consumo en el vehículo al usarlo exclusivamente en momentos que lo ameriten y así lograr una conducción eficiente.

Esto no quiere decir que siempre deba estar apagado, no. El punto es que lo uses con moderación porque tu comodidad también es esencial.

8. Verifica la presión de los neumáticos

Parte de los mejores tips para hacer conducción eficiente es comprobar la presión de los neumáticos. Pues, si te aseguras de que cuentan con la presión adecuada, optimizarás el rendimiento de tu vehículo, aunado que circularás con más seguridad.

Al respecto, te recomendamos leer todo lo que hay que hacer para revisar con éxito un coche parado.

Como ya sabes lo concerniente a la conducción eficiente qué es y cómo llevar una conducción eficiente, hazlo desde ya siguiendo el conjunto de consejos que te acabamos de dar para que te ahorres unos cuantos euros y preserves el planeta.

Por otro lado, recuerda que si aún no tienes tu carnet de conducir, hazlo ahora haciendo clic aquí. Escoge tu centro más cercano y solicita la información que requieras. ¡Estaremos esperando por ti!